martes, 25 de febrero de 2014

CONSULTA DIGITAL DEL PROFESOR GOTINGEN - RESPUESTA A LA CONSULTA Nº 2

Se ha recibido la siguiente consulta:

Querido her Doctor.

Sufro y padezco de un amor imposible, es metafísico como el humo. Lo veo, lo voy a tocar y se desvanece. Perdóneme estoy en las nubes, mi nombre es Marina de P, permítame que me mantenga en el anonimato, si se diese a conocer mi nombre, sería el fin de mi existencia, mi familia no me lo perdonaría en la vida. Soy de muy buena familia, de alto Copete y rancio abolengo como decía el Tío Demetrio, en casa los consultorios siempre se han considerado que eran para personas de conducta desordenada, trastornados de la moral, chifletas incultos y faltos de civismo. No quiero faltar al respeto a nadie y menos a sus pacientes, veo que trabajo no le falta, ni le faltará.
Como le decía respetado doctor, sufro palpitaciones de pecho, ataques de melancolía por ese amor que se esfuma como el humo, cuando lo voy a tocar. Es como si subiera al punto más elevado de la cima, al cenit universal y se esfumara. Esta situación es frustrante y no me explico cómo me puede pasar a mí, que siempre he llevado una vida pulcra y ordenada, siguiendo a raja tabla los consejos de padre Gabriel. No se crea doctor, me invade una desazón corpórea que no me deja vivir y los sollozos son constantes. Desgraciadamente no le puedo enviar una foto de mi amor, porque se desvanece como el humo. Qué puedo hacer doctor, acudo a su sabiduría de hombre avezado en el mundo humo y del amor, hay solución doctor, no me engañe. 
Marina de P…….


Respuesta del Profesor Gotingen:


Querrida Marrrrina,


En primer lugarr no debe preocuparse de manifestar sus 

sentimientos. No hay nada de que averrrgonzarse.


Cuento con gran experiencia en tratar a damas de la mas 

alta alcurnia, princesas, condesas, duquesas y todas esas.


Sin duda alguna usted siente además de las palpitaciones, 

las habituales brust herzklopfen, un picor insistente y

contumazz en cierta parte de su sinnlich a la que no me es 

dado referirme en pública consulta.


Mucho me temo que el humo ese no le va a servir de nada 

ya que a su edad y en su condición debe usted de 

materializar su amor en alguien dotado, ¿lee usted bieeen?,

do-ta-do de corporeidad. 


En cuanto a los arrebatos de tränen und schluchzen, son 

consecuencia de su falta de autoestima.


Usted, que se cree mujer inepta en materias 

carrrnales fleischlich, se castiga, centrrando sus pulsiones 

irracionales en un concepto más inmaterrrial, cuasi 

metaphysisch. 


Perro yo, el Profesor Gotingen le digo a usted Marrrina que 

no está en lo cierto. No. Nicht. NIIIICHHHT !!!


Usted Marrina es una mujer CAPAZ muy CAPAZ de hacer 

feliz a un hombre do-ta-do de corporeidad. MUY CAPAZ.


Uniendo sus indudables atrrributos intelectuales y su 

sensibbilidad a su capacidad amatorrria, usted Marrrina, 

superará mit perfektion el obstaculo psicologico que ahorra 

la mantiene atada a ese humo que nada significa.


En suma, le aconsejo que busque un caballero, ein 

begabter Mann Qualitäten, que no se ande por las 

rrrammmas y la lleve de paseo a algún bosque cerrcano.


En su caso combinar SEX und NATUR resultará 

particularmente beneficioso 


Verrá usted como desaparrecen humos, llantos, calorres y 

picorres.


Auf Wiedersehen, von hysterischen Frauen müde


Prof. Dr. H.F.T. Gotingen.

3 comentarios:

  1. Querido Profesor:

    Quiero poner una reclamación oficial, he sido zaherida y vilipendiada por una tal Marina de Portinax, que desgraciadamente tiene el mismo nombre que yo y su apellido empieza como el mio por la P...... No sé que problemas tendrá y si podrá usted hacer algo por ella. Veo que el secreto profesional y la confidencialidad de su consulta son como un queso gruyere. Debería de pensar seriamente en lo que le manifiesto. Le exijo tome cartas en el asunto, reprima la conducta de sus pacientes.

    M.P.

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  2. Agradezco a la señorita P... haber dejado claro que ella y yo no somos la misma cosa. Y puesto que, por un pudor muy comprensible, no se aparta de los puntos suspensivos, adelante me referiré a ella, si vuelvo a tener ocasión, simplemente como "la señorita María Pérez", que es lo .que le cuadra.

    Marina de Portinax

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  3. Mire usted, no tiene ningún derecho a cambiar mi nombre y apellido por una pataleta de niña infantil. Solo puedo decirle que me llamo Marina y mi ulstre apellido empieza por la P. Veo que me tiene envidia por mi gracia y donaire. Solo le diré que la P, es la letra de una gran nación, bañada por el mar atlantico y la Duquesa de Alba se queda coja ante la colección de titulos que posee la familia. ¿ Portinax, no figura en la guia heraldica verdad?.
    Marina P

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