jueves, 14 de mayo de 2020

Gesio y León.


 Gesio Floro fue procurador romano de Judea cuando estalló la primera guerra judeo romana contada por Flavio Josefo. A pesar de un nombre que a nosotros, que somos de humor simplón, nos hace gracia - imaginamos a un romano regordete y pasicorto-, parece que era un personaje irascible, autoritario y partidario, según se dice, del puño de hierro. Tal vez desbordado por la situación, tal vez impulsor de la misma por su actitud intransigente y poco dúctil, el caso es que los primeros disturbios fueron creciendo y haciéndose más graves, hasta convertirse en una inmensa revuelta que trajo la guerra. La guerra llevó al asedio de Jerusalén por las legiones de Tito Vespasiano, la toma y saqueo de la ciudad, el saqueo y la destrucción del templo, del que subsiste hoy, el muro de las lamentaciones. 
Algunos años más tarde, en 1919, alguien mencionaba el asedio de Jerusalén en su argumentación. Trotsky contestaba de esta manera a quien le escribía diciendo que Moscú pasaba hambre: “Eso no es pasar hambre. Cuando Tito sitió Jerusalén, las madres judías se comían a sus propios hijos. Cuando yo consiga que las madres de Moscú comiencen a devorar a sus hijos usted podrá venir a decirme: «Aquí pasamos hambre»”. Y todavía hoy hay quien se dice trotskista, e incluso leninista. Contra esta gente el combate no puede ser sino absoluto, implacable.


lunes, 27 de abril de 2020

Córvidos. Breve, por los famosos ornitólogos Javier Arrendajo y Norberto Picogordo.


Los cuervos pertenecen a la familia de los córvidos. Los pájaros que pertenecen a esta familia se caracterizan generalmente por ser sociables y vivir en bandadas. Así son por ejemplo la urraca, la chova, la piquirroja y la grajilla, con fama de ladrones de comida y objetos brillantes. Pero como en todo en la vida hay excepciones. Así, la corneja negra, solitaria y negra, su prima la corneja cenicienta (corvus cornix) es algo gris, claro. En cambio, la graja tiene un negro de tono rojizo, pico largo y puntiagudo de base blanca y es muy gregaria (le gustan las pandillas como a los quinquis) por lo que vive en grandes bandadas. Como puede verse, esto de los pájaros es lioso, lo que lo hace muy entretenido. Todos los córvidos crían en pareja (cada oveja con su pareja). El macho acarrea el material de construcción y la hembra que es muy hacendosa prepara el nido. El cuervo común que es el más grande de todos los cuervos, pues mide unos sesenta centímetros, permanece junto a su pareja para criar durante todo el año, y se piensa que a veces para siempre. Tienen sin duda gran paciencia. El cuervo es oportunista, inteligente –como pájaro-, versátil, y capaz de aprender.



domingo, 26 de abril de 2020

Tiempo de perros.


No empezar hablando del tiempo es la recomendación que da un buen novelista a escritores nóveles. Pero nosotros, ¿Qué quiere que le diga? No damos mucho de sí y tampoco esto es una novela. Así que diremos que hoy el aire es frio, el día espléndido de luminosidad, como un punto y aparte a la tromba de agua de ayer. Pudimos salir hasta los contenedores de reciclaje a tirar vidrio, como un buen ciudadano. Había escampado y el ambiente era de una primavera intensa, húmeda, con esa luz sutil, delicada, como una filigrana ante los ojos. Disfrutaban de ella los paseantes de perros que al parecer no se ven afectados por el confinamiento o apenas. Mientras ellos pasean se impide la celebración de la Misa en distintas iglesias, aunque el sacerdote y los fieles cumplan escrupulosamente con las medidas de seguridad impuestas por el estado de alarma, y en particular con el artículo 11 del Real Decreto que lo establece. Parece que por fin el animalismo rampante se ha impuesto ya del todo. Ya ve que le he traído de golpe a la más atroz actualidad. Tal vez hubiera sido mejor no dejar de hablar del tiempo.


lunes, 20 de abril de 2020

GALERÍA DE TIPOS FÍSICOS EXTINGUIDOS: Iván Bunin.


Retrato del escritor ruso por su compatriota Rossinsky. 
Observen que no sólo hay verdaderos bigotes sino una cuidada perilla. Las facciones son finas y hay elegancia en la actitud, la vestimenta, la mirada. Observen también la excelente pinta, el aire entre señorial –lo que denota su origen social- y ensimismado, lo que podría referirse a su condición de escritor. La impresión se refuerza por el fondo del cuadro, una biblioteca. Un esbozo de ojeras que apuntan cansancio y algo de melancolía, no consiguen menguar la nobleza, la dignidad y el empaque de su figura. Es posible que subsista parcialmente el tipo en algún rincón escondido y remoto. Pero no completo. Completo como tal, el comité científico de la Fundación Tato lamenta tener que considerarlo como definitivamente extinguido.
Incluimos una fotografía para que se vea que Rossinsky supo captar,
que no inventar. 



Temporada sin temporada. I.


El matador de toros Luis Mazzantini, el "señorito loco", apodado así por su tardía vocación taurina, pasando de los estudios y el cortejo de Amadeo de Saboya a las plazas, daba una vuelta al ruedo. Esto refiere Antonio Díaz-Cañabate en su Historia de una tertulia:

Don Luis, sonriente, mientras saluda, va diciendo: “¡Gracias, gracias, hijos de cocheros!”.

viernes, 17 de abril de 2020

Jornada electoral III. Nuevo fragmento de diario.


La Guardia Civil en la puerta del colegio electoral. A ella le queda el uniforme como si fuera un barrendero. Desfila el cuerpo electoral. Un gran número de ancianos decrépitos, oigo que dice un concejal. Dos viejas con bastón bastante despiertas; un matrimonio con sombrero de explorador él; dos gorditos de la mano, él tiene gran picota y pelo lacio, ella es eslava y grandota o al revés, grandota y eslava, y habla español con la boca encogida; una familia con dos niños, él tiene los pies diminutos, torcidos y girados hacia arriba, ella se queja mucho, es lógico. Un gordo y viejo comunista lo mira todo con aires exterminadores. Una abuelilla arrastra los pies, la mano pecosa sujeta un bastón con el que se mueve con agilidad. El apoderado rojillo es el de aire más presuntuoso y arrogante, con camiseta de marca rotulada en inglés y greñas de permanente. Un chándal, otro chándal, una muslera con un chor (short) que sólo tapa media nalga, la otra mitad vibra al aire. La chica guapa –que no es la del chor- vuelve porque se ha dejado algo. Una panza viene a votar y a lo lejos, detrás, una cabeza pequeña parece dirigirla. Una rémora quiere entrar con un San Bernardo gigantesco, señora por favor que no puede ser. Avalancha de abuelitas precedida de una señora con dos niñas pequeñas, cuidado que hay un escalón. Pasadas las doce se supera el diez por ciento de participación con la horda de jóvenes que vienen a votar, camisas negras, si negras, camisetas, sudaderas horribles, y de repente un personaje engominado y al rato las dos primeras corbatas. Y un señor delgado como un pájaro, otro que gira el cuello a derecha e izquierda sin parar, una mujer prácticamente desnuda, unos papás de los de mucho sentimiento, de esos que crean monstruos, quieren que sea el nene el que meta la papeleta, pero les dicen que de eso nada y se ofuscan. Luego dos cojos, a la vez, un loquito que habla sólo y mira para todas partes después de reír, la tontalpacma que nunca falta, mas chores de todos los colores. Casi a la hora de comer: él gran nariz de porreta y potente belfo sobre metro cincuenta, ella busca una cola en la que poder ordenarse. Un señor pregunta que por qué en la lista del censo que maneja la mesa electoral se raya el nombre de los que han votado, que él no piensa votar pero quiere una raya sobre su nombre y que exige una explicación. Ancianísima venerable con nariz de alcotán conducida por digan nieta, hay dudas sobre si podrá levantar la papeleta, pero al final lo logra sin el inadmisible concurso de la nieta. Melón de la Huerta, Arcadio, ha votado. Sonrisilla del interventor, nervios en un vocal, la presidenta superpotra principia un alarido histérico que logra contener. Dos pavas electrónicas piden papeletas del partido verde. Un marido acompañado de una loca pintarrajeada que es su mujer. El hombre, a todas luces sojuzgado y disminuido, sonríe como pidiendo perdón. Dos vocales le miran y luego uno hace al otro con dos dedos el gesto de la tijera cortando. Un presidente de mesa, en la misma sala, que había comenzado la jornada con mucha compostura, henchido de sentido del deber y traje de tres piezas, parece que por las entretelas escondía una petaca con aguardiente, por lo menos. Ya se oye perfectamente cuando en lugar del ¡ha votado! de rigor afirma con voz catarrosa que ¡aquí dejan votar a cualquiera!
Encerrados ya desde hace horas para el escrutinio, sólo nos falta el Ángel exterminador.

jueves, 16 de abril de 2020

Jornada electoral II. Fragmento de diario.


Acabo de ver a una tiorra política, tronando por las mesas electorales como torero viejo en plaza de pueblo, arrastrando recias patorras y melena cardada. Terrible ogresa. Ha llegado Nicasio el alcalde, viejo político de cabezón sin cuello, ha repartido saludos, abrazos, monedas, billetes y chocolatinas y se ha ido entre aclamaciones. Un guardia civil habla de la corrida de Miura mientras un tío chancletudo recoge papeleta animalista. Como nadie usa las cabinas sabemos lo que votan todos los vecinos. Una vecina acude con la señora que trabaja en su casa, cuidadora, y prácticamente le elige las papeletas, votan lo mismo, la señora delante, la criada detrás. Una escena de la prehistoria electoral. Dos nietas pimpantonas, casi unas señoras, de buen ver y buen aire conducen hasta la urna a una abuela decrépita en silla de ruedas. Una vieja roja echa espuma por la boca. Familia pepera con iniciales en las camisas y cara de mucho dinero, pero con los pies pequeños, mire usted; se besan se saludan, cuanta siesta reventada por el civismo democrático. Tienen que dejarse de esas chorradas policiacas con las que pierden el tiempo y leer a Joaquim Machado de Assis, un segundo Eça. Pareja de alcohólicos descoyuntados, papeleta en mano. Que insoportables el recuento, las actas y el personal sudado comiendo bocadillos revenidos. La presidenta de mesa lleva hierro en la nariz, moño sobre el cogote y viste elegante chándal negro que le ciñe como un guante silueta de Diana cazadora que no deja sitio a la imaginación. Masca chicle y dice vale y joé. La zapatilla deportiva triunfa sobre el zapato abotinado, el cuero y el cordón derrotados por la chancleta, una derrota que es previa a la derrota política, de cuando los hijos de familia salieron a pasear enseñando los pinrreles por primera vez, lo demás va detrás. No todo está en las formas, ya lo sabemos, pero que quiere que le diga. Nene con camiseta de Messi pregunta a su melenudo papá chandalero ¿qué es facha?; miran de reojo al que esto escribe. Bostezos terribles; se vota en familia, de una comunión vienen sin duda matrimonio con niños todos impecables, transmiten un aire retro por lo inusual de su aspecto. ¿De qué estampa antigua han salido? La poli saluda a la mona del lugar con un ¿qué hay Raqui?