miércoles, 8 de marzo de 2017

LOS RUMBEROS FAMOSOS.

De una carta a los lectores dirigida al Heraldo de Nava, contestada con evasivas por el Eximio Polígrafo.


Mucha sensibilidad, mucha palabrería pero en estas páginas no se ha dicho nada de José Alfredo Jiménez, de Toña la Negra, de Beny Moré, de Pedro Infante, de la Sonora Matancera, de Agustín Lara, de Jorge Negrete, de Omara Portuondo, de Lola Beltrán, de Chavela Vargas, de Bola de Nieve, de José Larralde, de Cafrune, y Manzanero, y la gorda Mercedes Sosa y Soledad Bravo, y no sigo…".


Un amable lector nos hace el reproche anterior, que hemos transcrito de la carta que amablemente nos envía. Tiene cierta razón, hemos guardado silencio, pero no por ignorancia, sino por pudor, porque evocar el mundo de los rumberos famosos es acercarse peligrosamente al terreno de las confesiones personales.

¿Es lícito hablar de la devoción del gran Bergamota por ese gran poeta que fue el autor de La media vuelta y de Un mundo raro? ¿Podemos referirnos sin ser indiscretos a ciertas francachelas que acababan sistemáticamente coronadas por un repertorio de corridos, rancheras, coplillas flamencas, payadas gauchas, habaneras, sones, todos ellos coronados por El Rey entonado a coro?

¿Podemos decir sin que se nos eche encima toda la gentuza –estamos un poco cansados de la gentuza- que una de las canciones que habitualmente tararea Doroteo, cuando ordena la biblioteca, cuando bruñe los aceros de las panoplias, cuando pavona los metales herrumbroso de la vieja colección de arreos, es Caminito español, de Atahualpa Yupanqi, en la versión de Cafrune? ¿Podemos decir que la condesa se emociona y suelta una lágrima cada vez que muere el canario del indio Marito?

¿Cabe mencionar el son, la gracia, la sandunga con que El Amigo Pulardo baila el danzón, la guaracha, el cha cha chá, el bolero más apasionado? ¿Podemos describir la agilidad de sus pies pequeños, la soltura de su inmenso talle, la gracia de su pasito adelante y pasito atrás, asidas las maninas a las caderas firmes de las negronas rumberas?

¿Y las tonadas y payadas a la luz de la luna, con la guitarra, con el habano encendido, con el poncho pampeano, con las espuelas de fierro, con las correas blancas de piel de gato -¡fíjense ustedes, piel de gato!-, con el sombrero de ala ancha, la calzona, la chaquetilla corta, el boto, con el sombrerote charro, el bigote charro y las chaparreras charras, con la soga de enlazar, con las melodías llaneras? ¿No es esto una provocación, no es esto como confesar que España no es sólo España sino que realmente se proyectó allí donde arribaron las naves y los hombres, incorporando aquellos lares a sí misma y quedándose ella allí, en fecunda creación? ¡Oiga no se caliente! No estamos seguros, tal vez un día, oiga usted. Mientras nos decidimos a ello, les dejamos con la copla.

 

Caminito español

Atahualpa Yupanqui

Por un camino de España,

camina mi corazón,

antes no se conocían,

ahora son amigos los dos.

Por un camino de España,

camina mi corazón.

A veces bajo la luna,

como una conversación,

entre el mar y los pinares,

va cantando el corazón.

A veces bajo la luna,

como una conversación.

Habla de pampas lejanas,

de unos aromos en flor,

de algún caballo perdido,

que en esas tierras quedó.

Habla de pampas lejanas,

de unos aromos en flor.

Como en los libros sagrados,

hay un tiempo de sazón,

vivían sin encontrarse,

hoy son amigos los dos.

Un corazón argentino,

y un caminito español.

 

El camino nunca es triste,

lo entristece la canción,

si el caminante le cuenta,

sus desvelos, su pasión.

 

El camino nunca es triste,

lo entristece la canción.

 

El día en que se separen,

que no se digan adiós,

el camino en su paisaje,

y sin rumbo el corazón.

 

El día en que se separen,

que no se digan adiós.

Hermoso amor sin olvido,

es la amistad de los dos.

 

Hermoso amor sin olvido,

es la amistad de los dos.

 

De un corazón argentino,

y un caminito español.

 

De un corazón argentino,

y un caminito español

lunes, 6 de marzo de 2017

SEXOS, lectura recomendada a melindres y bienpensantes

No siendo sospechoso de alineamiento ideológico con el autor, en puro acto de honradez intelectual me permito compartir con los amables lectores cepogordistas el artículo que publicó ayer en el ABC el señor Jon Juaristi.

Este artículo debería de ser de obligada lectura en el próximo Asamblea Plenaria de la Conferencia Episcopa y en todos y cada uno de los hogares dónde se ha implantado con dolorosa eficacia el buenismo de la nada.

Lo único reprochable al autor es que yerra al hablar de "derecha católica" tal cosa no existe, al menos en el parlamento español. Todas las opciones políticas  que se han presentado a las elecciones con un marchamo de humanismo cristiano  (desde el lejano escaño de Blas Piñar hasta hoy) han fracasado. 

La mal calificada "derecha sociológica" anda ayuna de lecturas y de ideas. Leer y pensar es para progres. Los "nuestros" a las cosas del dinero y de la "gestión", que eso es lo que importa para el progreso, lo de la batalla intelectual es un coñazo. ¡Que texto tan largo! Abrevia, macho que empieza el fútbol. 

Españoles católicos y sanos hay muchos. Que toquen poder y alfombra, ninguno o casi ninguno. Mientras las huestes bienpensantes se desgarran las vestiduras y se van a Zara a comprarse el repuesto.

¡Que razón tiene Alcides Bergamota, ésto sólo se arregla con letra de palo!



JON JUARISTI – ABC – 

SEXOS

05/03/17

 La derecha católica no para de tropezar en las trampas retóricas del enemigo.
Imaginemos que a un cura (o a una monja) le pescan un diario íntimo donde ha escrito lo siguiente: «La he visto cambiar de verano en verano, alegrándole la vista al prójimo retozando en la piscina de su barrio (….). La vi de bebé, ricitos de oro, el pañal abultándole el culete bajo el biquini. La vi de niña chicazo, melenita de paje, culotes de colorines y tetillas al aire». Le caería la del pulpo, ¿a que sí? Pero, como lo ha escrito Luz Sánchez-Mellado en «El País» del 2 de marzo («El “odiobús”»), me guardaré lo que pienso, no vayan a empapelarme.
La derecha católica no espabila. No se entera (o finge no enterarse) de que vive en un continente y en un país donde se persigue al cristianismo. No como en la Casa del Islam, donde matan directa y masivamente a los cristianos, sino de forma más artera, proscribiendo democráticamente el uso cristiano de la razón (o sea, el uso de razón), lo que no ha resultado difícil, porque el anticristianismo es una fobia mucho más extendida hoy que el antisemitismo en los años treinta, y participan de ella masas imponibles y anónimas, figuras del espectáculo y del deporte, jueces, fiscales, políticos de izquierda, derecha y centro, y macarras con pene o vulva y mando en plaza.
Y como no entiende nada, como ha reducido la fe de sus padres a moralismo y es incapaz de ver cómo está el patio y de dar una verdadera batalla política e intelectual, la derecha católica se deja entrampar en los carajales retóricos del enemigo e imita sus mismas tácticas (las de la campaña del Bus Ateo de 2009, por ejemplo) sin comprender que si de niños, penes, vulvas, publicidad mural y autobuses se trata, tiene todas las de perder, porque tendrá que explicarse y no sabrá hacerlo y acabará sacando el espantajo de una «inquisición gay», cuando lo que tiene enfrente es el mundo, la doxa, el resentimiento socializado, la banalidad del mal y un nihilismo sentimental y tóxico que utiliza a los niños como elemento patético.
¡Ah, el viejo Michel Foucault! ¡Cómo adivinó que la modernidad no exigía reprimir la propia sexualidad, sino confesarla y describirla públicamente, viniera o no a cuento! Los únicos que se habrían escaqueado hasta ahora de esa obligación serían los niños. Su silencio era lo que nos separaba todavía de la granja aviar y del gran barullo del gallinero humano entregado a una interminable pornolalia. Para que el niño confesara su deseo de vulva o pene era imprescindible el especialista que discerniera el sexo en lo que el niño dice y da a entender y no en lo que el cuerpo muestra.
Pero ya ha llegado, ya está aquí. Había que dar la puntilla a Dios, que «macho y hembra los creó» (Génesis, 1, 27), intolerable intromisión en los derechos animales de la especie y origen por tanto de la lengua fascista que nos ha obligado a hablar de niños con pene y niñas con vulva. Gracias a Dios, Dios ha muerto, y viva el sexador de pollos.
Si dijéramos que hay españoles con pene y españoles con vulva, podrían adscribirse a dicho sujeto político y nivelarse en la igualdad ante la ley tantos sexos culturales como los que distinguía Lawrence Durrell en la muchedumbre alejandrina. O más. Pero los mismos que se cargaron la inclusividad del género gramatical en aras del género biológico y de la distinción entre penes y vulvas (españoles y españolas, madrileños y madrileñas, vascos y vascas) se esfuerzan ahora en abolir esta última e imponer la de españoles con pene, españoles con vulva, españolas con vulva y españolas con pene. Así hasta que se aburran e inventen otra. ¿Cuántos sexos hay?, pregunta O’Brien a Winston. Dos, responde Winston. Error, dice O’Brien, y la aguja llega a mil novecientos ochenta y cuatro.
JON JUARISTI – ABC – 05/03/17

DE LOS FALSOS OFENDIDOS

Yo creía que con Mariano y su Banda del Empastre por un un lado y su monaguillo Iglesias por el otro, ya teníamos cumplido el escalafón cómico del teatrillo político. 

No es así, he de reconocerles que me equivocaba por completo y de mi error me han sacado los señores de Ciudadanos que en últimas fechas están haciendo denodados esfuerzos por unirse al reparto y de continuar con semejante progreso habrá que darles un papel protagonista.

Primero tenemos el asunto del califa murciano y su imputación.

Aquí, los señores de Ciudadanos se dedican a darnos la matraca todo el santo día con una especie de política de manos blancas muy del tono y fuste de la señorita pepis. 

Si hijos, ¡Si! Que ya nos hemos enterado de que sois buenísimos y transparentísimos y que representáis el azote de los corruptos, el espanto de los golfos, el martillo de los torcidos y la guadaña de los mangantes. 

¡Muy bien! Ya tenéis el diez en conducta ¿Y ahora qué? 

¿Vais a poner en el gobierno de Murcia al PSOE (como en Andalucia) para que los pobres huertanos tengan que sufrir las mil y un perrerías que un gobierno de PSOE/Podemos podrían ejecutar en poco tiempo.

Os sugiero que meditéis porque con esa estrategia de anti-política de empollón en el aula de la sagrada democracia vais a terminar por recoger cuatro votos, incluyendo familiares, amigos y deudos.

En otro frente y para demostrar que Ciudadanos puede interpretar casi cualquier repertorio, se ponen en falsete de unos, grandes y libres y ahuecándose como palomo pre-nupcial e informan a la audiencia que tienen previsto presentar una denuncia ante la Unión Europea a cuenta del infame y memo programa  Euskalduna naiz eta zu? emitido por la EITB.

Pero vamos a ver, ¿quien ha entrenado a estos galgos? ¿Dónde van y hacia dónde corren?

En primer lugar, no veo qué pinta la Unión Europea opinando de asuntos internos de España. A mi lo que opinen en Bruselas, Estrasburgo y Vladivostok del tema me la trae completamente al pairo. 

Esa iniciativa está muy en la línea antes apuntada del empollón que "se chiva" de que un condiscípulo le ha mentado a la hermana o le ha llamado "lila".

En segundo lugar, el programa en cuestión no es sino una consecuencia de la nefasta política seguida desde hace muchas décadas en torno al mal llamado "problema vasco": cesión educativa, entronización de la mentira, ocultación de historia, tradiciones y símbolos, etc... 

Ciudadanos es un partido "nuevo" pero se ha unido con armas y bagajes al error pretérito; aplicación de la Ley de memoria histórica por poner un ejemplo.

Tercero, las opiniones vertidas en el programa de marras y el guión del mismo no ofenden a los españoles, ofenden a la inteligencia y al buen gusto. ¿pero han visto ustedes la catadura personal e intelectual de los convocados a dar su opinión? 

Como dijo el otro día un magistrado en excedencia en un programa de televisión "El código penal no es el bálsamo de fierabrás" y tenía toda la razón.

Si "cagarse" en la madre de Dios no es una ofensa a los sentimientos religiosos, decir que los españoles son unos catetos o que la marcha real da ganas de vomitar tampoco va a considerarse penalmente relevante. Al tiempo.

En los últimos años en España se han quemado banderas, retratos del rey. Estando ministros del Reino presentes se ha tapado el busto del rey en un acto en parlamento autonómico, se ha abucheado el himno nacional repetidas veces, etc...

¿Ha pasado algo? No.

¿El gobierno de turno ha hecho algo? No.

¿La ley vigente ha servido para gran cosa? No.

Entonces ¿Qué?

Lo que hay que enmendar no se enmienda, lo que hay que quitar no se quita, lo que hay que edificar no se edifica. Resultado, el que vemos.

A mi todo este espanto y toda esta bulla falsa me cansan y me asquean. Menos hacerse los ofendidos y más darle a la mollera y al trabajo.

No creen en nada, no tienen nada en la cabeza, no han meditado nada, no quieren conocer la Historia ni estudiar la teoría general del Derecho, sólo quieren aparentar, salir en la foto, quedar bien, ser salvapatrias de cartón piedra, rellenadores de horarios televisivos, monosabios de akelarres democráticos, adoradores de la secta de la santa urna y del pesebre público.

Al próximo que me hable de la constitución le voy a regalar una caja de supositorios. Jamás se conoció un pueblo que adore más la norma positiva y acepte de tan buen grado un estado de injusticia y desarme del Derecho.

¿De que constitución hablan si todo el edificio que sostenía el sistema ha sido minuciosamente demolido?

Volvemos al mismo problema que en la II República y en tantas otras situaciones de nuestra larga y fecunda Historia, los políticos están muy por debajo del administrado, no hay nivel, solo falsas imágenes y regüeldos fríos, con la carita p'a un lao, que no te vean el lado malo.  

domingo, 5 de marzo de 2017

PASEO ARBITRARIO

Honorato de Balzac muere en 1850, tenía sólo cincuenta y un años. 1850 es el año en que nace el gran Mopas, es decir Guy de Maupassant, cuyos cuentos son sólo comparables a los del ruso Chejov, quizá el maestro del género. Chejov es unos años más joven que Mopas, pues nace en 1860. Maupassant muere muy joven, a la misa edad que Gógol, con cuarenta y tres años, en 1893. Gógol en 1852. Chejov con cuarenta y cuatro en 1906.

Contemporáneo de Balzac es Henri Beyle, Stendhal. Los dos habían nacido en el siglo XVIII. Victor Hugo en 1802. Que poca gente ha leído realmente Los miserables. La gente va al cine y se cree que lo ha leído. Así son las cosas. Stendhal tiene treinta y dos años en 1815, cuando ocurren la vuelta del Ogro durante los cien días, Waterloo y el nacimiento de Anthony Trollope. El malvado Thénardier saquea los cadáveres de la batalla, manosea a los coraceros muertos, roba relojes –esos relojes con retratos en miniatura y mechones de pelo de recuerdo- y arranca piezas dentales. Balzac que había nacido en 1799 tiene dieciséis, Dickens es un niño de tres años pues nace en 1812. El año anterior había nacido Thackeray.

Nicolás Gógol, viene a ser de la quinta de Stendhal y de Balzac, aunque más joven que el primero, le separan sólo unos años del segundo pues Gogol es de 1809. Es como un eslabón que enlaza a los dos franceses con los dos ingleses. Muere en 1852, dos años después de Balzac. Escriben por tanto en la misma época. Las Brontë aprietan siguiéndoles de cerca, pues Charlotte (Juana Eyre) es de 1816 y Emily (Cumbres Borrascosas) de 1818, como Iván Turgueniev, autor de los extraordinarios Diarios de un cazador. Gustavo Flaubert nace en 1821 y Juan Valera en el 24. Son plenamente coetáneos, aunque Valera sobrevive muchos años al autor de Madama Bovary y tendrá tiempo de ser el descubridor de Rubén Darío, pues llega al siglo XX. Muere en 1905, con ochenta y un años. Flaubert había muerto en 1880 con cincuenta y nueve. Turgueniev en 1883 con sesenta y cinco. Tolstoi que había nacido en 1828 les sobrevive a todos. Muere en 1910, a la edad de ochenta y dos años, uno más que Valera.

Bécquer y Rosalía de Castro nacen en el mismo año, 1837. Rimas y leyendas, Cantares gallegos... En 1839, en el Brasil, nace Joaquim Machado de Assis, que publicará Los papeles de Casa Velha en 1885 y vivirá hasta 1908.

En la década del cuarenta nacen José María Eça de Queiroz, quizá el más grande de todos los novelistas, en 1845; el extraordinario Galdós - Fortunata y Jacinta, Misericordia, La desheredada, los Episodios…-, en 1843, el mismo año que Henry James, y Zola en 1840. En la del cincuenta doña Emilia, 1851; Clarín, 1852; Maupassant, ya lo hemos dicho, 1850 y Conrad, 1857. Décadas prodigiosas, inagotable vivero de lecturas. Todos ellos salvo Maupassant llegarán al siglo XX. Queiroz por los pelos pues muere en 1900 con apenas cincuenta y cuatro años, La ilustre casa de Ramires, La ciudad y las sierras, Alves y compañía, La capital y un sinfín de crónicas sobre sus estancias fuera de Portugal se publican póstumamente. Para Valle-Inclán habrá que esperar a 1866.

Los Papeles Póstumos del Club Picwick - por los que sentimos absoluta predilección- y Oliverio Twist se publican entre 1836 y 1838. La Cartuja de Parma se publica en 1839, Madama Bovary en 1856, Los Miserables en 1862; Guerra y Paz en 1869, Ana Karenina en 1875; La Regenta en 1884 y 1885, un tomo cada año. 1887 es un año extraordinario, pues se publican Fortunata y Jacinta, la Reliquia, Los Pazos de Ulloa y La Madre Naturaleza. Los Maia en 1888. Tío Vania en 1897. Lord Jim entre 1899 y 1900.

La Comedia Humana se escribe sin descanso, hasta la extenuación, entre 1829 y 1850. Balzac nos dice en el prólogo hablando del escritor: “Pocas obras resultan en mucho amor propio, mucho trabajo resulta en una infinita modestia”.

Hasta aquí.

jueves, 2 de marzo de 2017

Los elementos criminales y el miembro enfermo (a propósito claro de la Generalidad de Cataluña y de la desidia del Gobierno español, sin dejarnos al resto de subversivos, PNV y compañía).


Fragmento del discurso de César (don Julio) en Placentia, año 49 antes de Jesucristo, citado por John Fuller en su libro Batallas Decisivas del Mundo Occidental:

“Ninguna sociedad humana puede conservar su unidad y continuidad de existencia, si los elementos criminales no reciben su castigo, puesto que si el miembro enfermo no es objeto de tratamiento adecuado, todos los demás acabarán por contagiarse de la infección, como ocurre también con nuestro cuerpo. Menos que en ningún otro lugar, puede permitirse relajamiento alguno de la disciplina en un ejército, porque cuando los elementos díscolos (…)".

Nosotros, es decir, nosotros, decimos que la unidad de España es en la actualidad la unidad garantía posible de libertad para sus ciudadanos, condición necesaria, aunque no suficiente, pero sin la que no cabe esperar que triunfe una sociedad vertebrada en torno a la libertad.

miércoles, 1 de marzo de 2017

BORRACHOS


En su Discurso a las Juventudes de España, Ramiro Ledesma Ramos se refiere varias veces a los asalariados como a algo residual, si no lo más bajo de la sociedad, casi. No es que se pronuncie expresamente sobre ello, sino que es algo que se desprende de forma natural de las páginas de su extraordinario libro. Veamos un ejemplo (los subrayados son nuestros): Si las juventudes angustiadas y sensibles a las desgracias de España emprenden una acción enérgica en pro de su fortaleza y liberación, tienen que buscar con más insistencia que otros los apoyos y colaboraciones de una parte —lo más amplia que puedan— de la clase obrera, de los asalariados, de los pequeños agricultores y, en fin, de esa masa general de españoles en constante y difícil lucha con la vida.


Ya ven ustedes. En otra parte del libro se vuelve a insistir en un tratamiento parecido, al decir: (…) Y más aún, no se trata sólo de asalariados, de proletarios. El paro amenaza hoy asimismo a zonas inmensas, pertenecientes a las clases medias, y se agudiza cada día con caracteres más graves en las juventudes.


Obsérvese al asalariado asociado al proletario y de alguna manera considerado como no perteneciente a las clases medias. La primera edición de Discurso a las Juventudes de España es de 1935.


Con otros matices y desde otra perspectiva, Hayek, el economista premio Nobel, uno de los padres del moderno liberalismo, viene a coincidir con el fundador de las Juntas de Ofensiva Nacional Sindicalista, las JONS, asesinado en 1936, en las tapias del cementerio de Aravaca.


Lo que Hayek viene a decir en su libro Los Fundamentos de la Libertad (lo tienen en Unión Editorial) es que la libertad no puede garantizarse, ni existir plenamente, en una sociedad compuesta mayoritariamente por asalariados. La razón es obvia. Se trata de la doble dependencia del asalariado, por un lado de la empresa que le paga el sueldo, y por otro del Estado. El Estado que controla, por medio de las declaraciones que obtiene de la empresa relativas al salario , la totalidad de los ingresos que percibe el asalariado, personaje sometido por tanto a una doble presión.


Ni Ledesma Ramos ni Hayek descalifican expresamente al asalariado, pero para el primero, en 1935, el asalariado viene a ser una categoría ínfima, y para el segundo, una sociedad compuesta en su mayoría de asalariados no está en condiciones de garantizar la libertad, ni por tanto de vivir en libertad.


Hoy nos enteramos de que la empresa aseguradora “Lloyd's ha prohibido beber alcohol a sus empleados de 9 de la mañana a 5 de la tarde. Es la última medida que ha tomado la aseguradora para sus 800 trabajadores de Londres, según una circular interna a la que ha tenido acceso el Financial Times.” Es una noticia que aparece en www.Libertaddigital.com. Por un lado se imita una vez más la forma de hacer las cosas de los Estados Unidos, dónde parece que no se bebe alcohol durante la jornada laboral (aunque al terminar la gente corra a cogerse unas cogorzas de campeonato). Por otra parte, parece que la medida está relacionada con los problemas que tradicionalmente tienen los anglosajones con el alcohol. Al parecer son frecuentes los casos de empleados que vuelven a trabajar después de comer completamente beodos. En los veinte años que este asalariado lleva trabajando en España, no ha visto nunca algo así, un compañero de trabajo beodo que organice un circo en el despacho, la empresa, la oficina o el polígono. ¿Es la prohibición la solución al problema, pagando justos por pecadores? ¿Puede una empresa entrar a regular lo que hacen sus empleados fuera de las oficinas? Bastará con que entre el caballo de Troya una sola vez, so pretexto de orden, decencia, salud o de lo que sea, para que una vez abierto el portillo las empresas secunden a los políticos en su ansia por regularlo todo.


Si ya vivimos bajo el imperio de una socialdemocracia política empeñada no sólo en el brutal control de nuestra economía, sino en un implacable adoctrinamiento de conciencias, sólo le faltaba al asalariado, ese mindundi, que le empezara a llover normativa invasiva de su intimidad y esfera de derechos desde la empresa que le paga. Si fulano llega beodo pues despídale, pero a los demás déjenos en paz.


Artículo aparecido en el Heraldo de Nava, con la firma de Alcides Bergamota el Grande y Doroteo Casapalacio.


Post scriptum.

  1. Nos indica Tato, que tal y como están las cosas, ganas de cocerse no faltan.
  2. Empiezan a producirse movimientos civiles de protesta contra los abusos de Estado, administración y clase política. Ayer en Andalucía por algo tan concreto como el impuesto de sucesiones que en esa región termina de chupar la sangre de sus habitantes. Esto es algo muy positivo, una luz que permite concebir ciertas esperanzas. No existe hoy lo que podríamos llamar un partido de derechas con representación nacional, si surgiera uno capaz de canalizar lo que parece un descontento en aumento, tal vez nos ahorraríamos a un Trump. El mundo de Hillary ya lo sufrimos a diario.

EL AUTOBÚS DEL ODIO

La reciente polémica en torno al autobús de Hazte Oir, pone de manifiesto un asunto de gran interés, un asunto incómodo que los bienpesantes evitan como la peste pero que a mi juicio es capital, me refiero a la imposición del pensamiento único que va unida a la eliminación científica y sistemática de cualquier célula de disensión.

Como ha sido demostrado y explicado en reiteradas ocasiones por autoridades de nivel indiscutible (por ejemplo el cardenal Sarah) la agenda mundial de la ideología de género tiene por objeto modificar radicalmente al hombre a través de la demolición de la visión cristiana del mundo y por tanto de la antropología cristiana fundada en el orden natural de lo creado.

En España, los operativos del movimiento (que cuenta con infinidad de ramificaciones en todos los ámbitos de la sociedad y la actividad humana) han conseguido numerosas victorias, siendo una de las más importantes la aprobación de un tipo penal "el delito de odio" incorporado al Código Penal mediante la reforma de 2015. 

No es éste el lugar para detenernos en un examen detallado de la norma, baste decir que la inclusión específica de la orientación sexual entre los supuestos de hecho, abre (potencialmente) una puerta a interpretaciones que igualen la opinión diferente con el odio.

La ideología de género es una opinión no una verdad indiscutible, si opinar en contra de la ideología de género puede interpretarse como un acto de fomento o incitación al odio y a la hostilidad contra los que piensan diferente (y abogan por la ideología del género y sus consecuencias) nos encontramos ante el riesgo de la condena ideológica (como no piensa como yo, me odia) y el serio riesgo de sufrir un castigo penal.

¿Manifestar una visión contraria a la ideología de género supone incitación al odio? 

¿Exponer esa opinión de manera clara en un lugar público supone una incitación al odio?

Ese es el quid de la cuestión del autobús y será muy interesante conocer el razonamiento del fiscal y e su caso del juez que revisen este asunto.

Espero, por el bien de la Justicia y del futuro de España que no se caiga en la persecución ideológica al amparo de un tipo penal cuyo valor es sumamente discutible. 

Opinar distinto no supone odiar, aunque el movimiento de la verdad única no hace prisioneros ni perdona disensos.