jueves, 17 de mayo de 2018

La cosa va de generales.


Es recomendable, de vez en cuando, un poco de historia comparada, para tratar de limpiar las telarañas cerebrales y el baúl de los tópicos, simplezas y memeces sobre, por ejemplo, la historia de España. A continuación un ejemplo de lo complejo que ha sido el siglo XX, que nos salta a las narices leyendo un tocho sobre el desembarco de Normandía.
Junio de 1944, los aliados han desembarcado y por fin el general De Gaulle logra tocar tierra francesa y organizar un primer acto en la ciudad de Bayeux recién liberada y milagrosamente intacta. Gran expectación, multitud aclamando al general que se dirige a la muchedumbre. En medio de la multitud una anciana exclama:
- Vive le Maréchal!
Al parecer el general le dijo a su acompañante más cercano:
- Otra que no lee los periódicos.
Poco antes el general había estado en la subprefectura dónde había sido recibido por el subprefecto, luciendo la gran faja tricolor. En la pared seguía colgado el retrato del Maréchal Pétain. Parece que al darse cuenta, pero sin aludir a ello, el subprefecto pasó un mal rato. El general De Gaulle no dijo nada.
Esta primera visita a Francia después del desembarco, cuando todavía los ejércitos aliados no habían logrado rebasar Caen ni abrirse paso fuera de Normandía fue el primer acto de todos aquellos destinados a evitar que Francia cayera en manos comunistas o en los horrores de una guerra civil.
Para el Heraldo de Nava, Genaro García Mingo.

1 comentario:

SI QUIERE ECHAR SU CUARTO A ESPADAS, YA SABE AQUÍ. CONVIENE QUE MIENTRAS ESCRIBA ESTÉ USTED FUMANDO, CIGARRO O INCLUSO PIPA.